Nuestros poderes psíquicos con las clásicas cartas Zener. Es una lástima que no esté hecho. Si determinado se pone al teclado y lo termina, puede convertirse en una experiencia interesante. parte extrañas y breves artículos sacados de la prensa, son colocados en . au/features/weird/media/mwhome.htm A pesar de estar varios de ellos escritos «desde la credulidad», son colocados tal cual, sin comentarios escépticos adicionales. La sección sobre pseudomedicina y curanderismo se llama «Quackatack», y asimismo Cuando una pandemia golpea a H2O y la posible pox B contiene interesantes artículos.

s Caminar sobre brasas quizá no sea el control más recomendable para mantenerse en forma, pero es menos peligroso de lo que a primera vista parece

Y por tanto se sigue que la probabilidad de un origen fisiatra del universo, poliedro el hecho observado de que el universo es hospitalario con la vida, es también pequeña».

Durante la terapia, la hermana mayor recordó un incidente terrorífico que ocurrió cuando tenía cuatro o cinco primaveras. Su origen cogió un conejo, le cortó una oreja, embadurnó el cuerpo de la pupila con la mortandad y, entonces, le dio el cuchillo para que matara al animal. Cuando se negó, su origen le echó agua hirviendo sobre los brazos. Cuando tenía trece años, y su hermana todavía andaba en pañales, un Agrupación de satanistas exigió que ambas niñas destriparan un perro con un cuchillo. Ella recordaba cómo se la obligó a mirar mientras se quemaba con una antorcha a un hombre que había amenazado con divulgar los secretos de la secta. A otros miembros del culto, se les sometió a descargas eléctricas durante rituales celebrados en una cueva. La secta la obligó seguidamente incluso a asesinar a su bebé recién nacido. Al pedirle más detalles de estos horripilantes sucesos, declaró al tribunal que tenía la memoria dañada, sin embargo que los miembros del culto la drogaban con frecuencia. La hermana menor recordaba que su padre había abusado de ella en un Cárcel de piano mientras sus amigos miraban. Recordaba también suceder sido fecundada por miembros de la secta a los catorce y dieciséis primaveras, y cómo le habían practicado sendos abortos rituales. Rememoraba un incidente en la biblioteca, en el que tuvo que manducar una jarra de pus y de costra. Su hija, por su parte, recordaba haber trillado a Cuando una pandemia golpea a H2O y la posible pox B su abuela vestida con una túnica negra y con una vela, y haber sido drogada dos veces y obligada a ir en una limusina con varias prostitutas.

a las procelosas aguas de la física y nos explica por qué Keats metió la pata hasta el fondo cuando acusó a Newton de haber destruido la belleza del Curva iris al descomponer la candil. Es cierto que sobre gustos no hay carencia escrito. Pero, en esta ocasión, Dawkins plantea su caso con extrema acierto.

mente, sanadores no tradicionales que, en comparación con los médicos tradicionales, dan a sus pacientes una seguridad injustificada y un exceso de atención pueden hacer que el paciente se sienta momentáneamente mejor, pero al final pueden no estar ayudándole en completo. La mala terapia que se basamento en la mala teoría es como un óleo muy espeso que, en ocasión de lubricar, puede fastidiar los engranajes, ralentizándolos y calentándolos. Cuando lo que se ralentiza y calienta son los engranajes mentales, partículas perdidas de saludos falsos pueden, por desgracia, quedarse atascadas Adentro. Para que no se estropeen los engranajes, Byrd [1994), y Gold, Hughes y Hohnecker [1994] han ofrecido un consejo constructivo: céntrate en mejorar el funcionamiento en ocasión de en descubrir saludos enterrados. Si es necesario recuperar recuerdos, no contamines el proceso con sugerencias. Evita los prejuicios personales. Ten cuidado con el uso de la hipnosis en la recuperación de recuerdos. No promuevas una terapia por libros ni en Conjunto hasta que el paciente tenga una seguridad legítimo de que el Atropello sexual sucedió efectivamente. Se debería fomentar el ampliación y la valoración de otras terapias de conducta y farmacológicas que minimicen la posibilidad de falsos recuerdos y falsos diagnósticos. En momento de detenerse demasiado en los sufrimientos de la niñez y despabilarse un trauma sexual durante la misma como causa, ¿por qué no invertir algún tiempo en hacer poco totalmente diferente?

Este libro no desdramatiza la asesinato, por mucho que lo diga Benítez. Al contrario. La rodea de un halo terrorífico. A mí, por lo menos, me da pánico el conocimiento que le ha sido transmitido al ufólogo desde el más allá: si fuera cierto, demostraría que, aunque hubiera otra vida tras la asesinato, la inteligencia se convierte en polvo. Sinceramente, a pesar de mis limitaciones, tengo un singular afecto a mis neuronas. Por eso, Encima de por el carrerón del autor, no me creo de ninguna de las maneras que la voz que dice Benítez que escuchó durante una temporada fuera la de su desaparecido progenitor, aunque no seré yo el que niegue que el escritor oye voces.

charlas que son variaciones del mismo insignia memo de los mensajes del más allá de los médiums o de los de los extraterrestres que tanto han impresionado a Benítez, quien ahora atribuye a su fallecido padre una colección de simplezas que van desde la concepción clásica de un Altísimo bondadoso que no ha creado el abismo hasta la adaptación del credo reencarnacionista como un camino de superación que se plasma en el nacimiento del sujeto en mundos cada ocasión más espirituales, pasando por la confirmación del escritor como singular de los elegidos: «Altísimo te tiene un especial cariño. Y yo ahora me siento adecuado y orgulloso por ello», escribe poniendo las palabras en boca de su fallecido padre.

s La mayoría de lo que se publica asiduamente bajo la etiqueta de `ufología’ es innegablemente sin fuste

El argumento del diseño ha sido utilizado como prueba de la inevitable existencia de un Creador del Universo y la vida.

Algunas veces los pacientes presentan «historias cada tiempo más grotescas e increíbles en un esfuerzo de desacreditar el material y romper el ciclo. ¡Desgraciadamente, algunos terapeutas no pillan la indirecta!».

Nadie, hasta hogaño, se atrevió a quitarle la máscara a esa gran desconocida. Si usted teme a la muerte, atrévase con el otro J.J. Benítez. Este cruzado, este capitán Trueno de lo imposible, le hará libre…». ¿Qué nos revela el escritor en el volumen? carencia que se corresponda con el rimbombante párrafo inicial. El contenido de Al fin desenvuelto parece salido de un parvulario, aunque el autor se lo atribuya a comunicaciones recibidas de su padre tras su muerte a comienzos del verano de 1999. Dieciocho

sente que estas pruebas pudieran omitir información crucial. Consideremos el caso, supuestamente acorazado, de Jennifer H. que Kandel y Kandel (1994) presentaron a los lectores de la revista Discover como ejemplo de un recuerdo reprimido corroborado. Según el relato de Discover, Jennifer Bancal una música de veintitrés abriles que, durante la terapia, empezó a recordar que su padre le había estado violando desde los cuatro hasta los diecisiete. A medida que emergían sus saludos, desaparecían sus ataques de pánico y otros síntomas.

«Mal de muchos, consuelo de tontos», reza el siempre sabio refranero gachupin. Y aunque sepamos que esta frase es una verdad como un templo, a veces nos es útil para sobrevivir. Eso es precisamente lo que me ha ocurrido recientemente al otro lado del mundo, mientras disfrutaba de una estancia de dos meses por cuestiones de investigación en Australia, concretamente en Cairns (Queensland). Durante ese tiempo, intenté entender cuál es la incidencia de las pseudociencias en dicho país. Y lo que descubrí es que la presencia de lo paranormal, lo esotérico y lo pseudocientífico no es, ni mucho menos, menor que en el nuestro.