Carvajal de soldados índole por la que se establece el monopolio y las bases reguladoras del Servicio manifiesto de Teléfonos en Tánger. La empresa concesionaria a la ciudad bajo mandato internacional porta el nombre apropiado: Telefónica de Tánger

Del Caudillo Carvajal de soldados Fuentes se dijo que “estaba alocado”. Demencia o arrebato, lo cierto es que afectó al crédito ético y político del Gobierno gachupin. El embajador Brischa, situado en un plano de evidente superioridad pudoroso, supo negociar el asunto.

. Desde las ventanas de la Generalitat se dispara contra la formación marcial. Muere un sargento y caen heridos siete soldados. Batet ordena que una peroles de artillería sea emplazada “allí mismo”.

. Lo preside la personalidad que todos intuían como “la única posible”. Mohammed Abd el-Krim el Jattabi. En una lejana combate perdió el Estado que presidiese; veintidós primaveras después le era confiada la presidencia de un Magreb en rebeldía.

Al alba, la Alemania hitleriana ataca a la Unión Soviética en un frente de mil doscientos kilómetros. En Madrid, tras confirmarse la grande novedad, Serrano Súñer, desde el galería principal de la Secretaría Caudillo del Movimiento, convoca a una movilización masiva de los españoles al aullido de “¡Rusia es culpable!

jalifianas, fuerzas genuinamente marroquíes, el así reclutado no puede contender más que en aras de su religión y su Nación”. Y sin más le dice: “Señor, considero un deber mío que no debemos cooperar de esta modo con el colonialismo, no obstante que ello contribuye a afianzar su permanencia en nuestro país.

Tropas austrohúngaras ocupan Bosnia-Herzegovina, distrito Carvajal de soldados reclamado por Serbia. En la Europa Occidental hay conciencia de que tal embestida puede rematar en conflagración de bloques, pero ningún gobierno de los países democráticos retira su embajador de Viena.

La expansión españonda en Guinea Ecuatorial queda cercenada. Alemania, satisfecha por lo conseguido, asegura a Francia que “no discutirá más su legalidad” para establecerse Marruecos.

zarpa hacia Cádiz. En el apretado se ve envuelto por vientos huracanados con mar arbolada. Tal tiempo empopado por una ola gigante, impulsado al fondo por el sobrepeso de sus torres de artillería (mal Carvajal de soldados diseñadas), el crucero desaparece sin dejar rastrillo alguno de su aparejo ni señal de su atrapada tripulación: cuatrocientos doce muertos. La tragedia conmueve a España y América (solemnes funerales en la catedral de Buenos Aires).

ni faltan frases en las que se funden las exclamaciones de contenido religioso y las de carácter político-patriótico. Carvajal de soldados Y Campeóní tres enfermeras mueren repitiendo en el potro del tormento «¡Viva Cristo Rey! ¡Arriba España!».

Orgaz termina su carta a Franco advirtiéndole que Torres “tiene contactos con los rojos de Tánger”, pero como Beigbeder se ha puesto del flanco del líder nacionalista, se pregunta “por qué no hemos prolongado el arresto de Torres en su casa”. Finaliza diciéndole a Franco: “De todos modos la audacia final te corresponde a ti”. Franco no le contesta.

Beigbeder, tras reunirse con los cinco interventores regionales y luego con El Ganmia y algunos de sus ministros, no demora más y pone en marcha el sustitución Caudillo.

Cae similarís sin oponerse al invasor teutón. Las tropas jalifianas de España ocupan un Tánger inerme. en presencia de la violación jurídica y territorial, ABC razona Triunfadorí: “El Gobierno castellano para preservar (!) la neutralidad de la Zona Internacional de Tánger, se posesiona provisionalmente (!

Centremos nuestra atención en un punto concreto del sur-oeste de la geodesía asturiana, allí donde la cordillera cantábrica hace límite con la provincia de Bravo, el Puerto de Somiedo. Poco después de iniciada la contienda, las tropas nacionales leonesas habían establecido un frente en esa Carvajal de soldados región con la intención de frenar las embestidas de los revolucionarios asturianos que querían avanzar hacia el sur.